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8.Ene.2011 / 08:00 am / Comentarios desactivados en Diputados AN: Debate, Pueblo Legislador y Trabajo

Grano de Mostaza

La instalación de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela el pasado 5 de enero de 2011, se constituyó en un acontecimiento extraordinario de la vida republicana. Estimo que ha sido el primer gran evento bicentenario conmemorativo de la instalación del congreso independentista del 5 de Julio de 1811. Se instituye en una formidable oportunidad para la evocación de tan excelsa fecha. La pluralidad de pensamientos, visiones del mundo, de la sociedad y del Estado estarán presentes en los debates, y desde ahora se evidencia en los parlamentos de los diputados asistentes, las diferencias de enfoques, ideologías, metódicas y praxis de la política con “P” mayúscula. Realmente hay un crisol de representaciones de variados intereses, muchos de ellos contrapuestos; inclusive hay Diputados y Diputadas que abiertamente son partidarios de que Estados Unidos de América, la primera potencia imperial, tenga más injerencia en los destinos de la patria venezolana. Algunos voceros no ocultan sus posturas segregacionistas pasadas y hablan de los intereses empresariales y sectoriales de la economía y las finanzas públicas. También hay los moderados y de vías intermedias.

Lamentablemente en esta apertura, parte de la bancada oposicionista propuso a personajes sórdidos con sus complicaciones judiciales a ocupar parte de la directiva de este Poder Público Nacional, lo cual fue rechazado de manera contundente por el bloque bolivariano y socialista. Tal como lo exige la Carta Magna, el Reglamento Interior de Debates permite casi exhaustivamente el control de ejercer debidamente el derecho de palabra. Quienes aún vociferan que vivimos en dictadura quedaron callados y atónitos ante el candente escenario de una batalla ideológica entre posturas neoliberales y socialistas por la construcción de una sociedad de derecho y justicia. Más de una docena de partidos políticos con sus voceros compartieron civilizadamente el escenario que fue comunicacionalmente cubierto ampliamente por infinitos canales de radio y TV nacionales e internacionales. El matiz ardiente de la jerga caribeña se hizo sentir como parte que somos un pueblo peculiarmente expresivo a la hora de dirimir nuestros rebates. Tuve la oportunidad, ese memorable día, de caminar desde el Panteón Nacional hasta la sede del Capitolio Federal, luego de finalizada la sesión, me integré a una gran concentración popular en los alrededores de la plaza O’Leary, posteriormente vi por TV que los oposicionistas al gobierno también compartieron con sus elegidos; Honestamente, una vez más, capté profundamente el espíritu democrático que vivimos los venezolanos. Creo que la mentira como herramienta mediática de hacer política sufrió en la Asamblea Nacional su primera derrota. ¿Dónde está la Dictadura de Hugo Chávez? ¿Hay o no democracia en Venezuela? ¿Somos en realidad un pueblo soberano? Indudablemente que es necesario cada vez más avanzar y profundizar la democracia participativa y protagónica de los venezolanos tal como lo exige la Constitución del 99. Lo auténticamente revolucionario de esta era política, es que en este momento el pueblo transite y continúe el avance en su rol soberano por la construcción y conducción de nuestra república bolivariana. Somos soberanos a elegir y votar, somos auténticamente “el pueblo elector”. Con la majestad y organización del Poder Electoral continuamente lo hemos evidenciado. Llegó ahora el momento para “el pueblo legislador”. Llegó la hora del poder popular para construir en comunidad desde el profundo espíritu de las leyes, la legislación que viabilice la mayor suma posible de seguridad y garantía social, la mayor suma posible de desarrollo integral y felicidad para todos.

La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, y la Asamblea Nacional como órgano que ejerce el Poder Público Legislativo del Estado, emana de la soberanía popular y a ella está sometida. Invito formalmente a los diputados elegidos por Nueva Esparta a que aunemos esfuerzos para legislar junto al pueblo para el desarrollo de nuestra única región marítima insular. Somos cuatro (4) diputados principales con suplentes, que en Caracas y aquí provincialmente, podemos junto al pueblo profundizar nuestra democracia y allanar caminos de seguridad, desarrollo y prosperidad al heroico pueblo neoespartano. Los invito pues a debatir, legislar y trabajar con una agenda debidamente consensuada, con la altura y respeto que nos demanda nuestro pueblo. Por el Bloque Socialista Bolivariano estaremos este servidor y el diputado Febres Rodríguez como compatriotas prestos y seguros de que sumaremos esfuerzos para que así sea. “Viva el pueblo neoespartano que nos eligió”. “Viva el pueblo venezolano”. “Viva el pueblo legislador”. Venceremos.

William Fariñas