Artículos
La independencia de la patria venezolana como proceso histórico ha sido creación heroica de un pueblo unido sin complejos para la lucha, del cual no nos avergonzamos. Hay plena conciencia de las mil y una dificultades que hemos transitando para categóricamente afirmar que no somos súbditos de nadie, que tenemos libertad absoluta y libre autodeterminación para decidir en colectivo los destinos de nuestra Nación. Solventamos la esclavitud como problema determinista y terrible de la humanidad y su modelo perverso de sometimiento de los habitantes más pobres y desprotegidos. Algunos de nuestros próceres por intereses mezquinos fueron incapaces de negar la libertad personal de sus servidumbres esclava de sus haciendas familiares. Ante ello la figura emblemática del Libertador nunca olvidó ni abandonó a los más oprimidos, ni los dejo a su suerte. El padre Bolívar sabía que la felicidad y dignidad del pueblo se asocia a garantizar el derecho y justicia para que los ciudadanos les sean garantizados los bienes materiales y espirituales de la vida. Esta lucha presentará muchas batallas por venir, los enemigos externos e internos de la patria siguen vivitos y coleando. Lamentablemente aún se constata personajes racistas y fascistas que atentan contra la nobleza y grandeza del pueblo protagonista de esta historia incólume. Siempre tenemos que estar alerta y atentos. Sin dejar de ser autocríticos tenemos que estar en sintonía para apoyar diligentemente las demandas del pueblo ante la situación de presión y desabastecimiento. El Patético capitalismo tiene sus agentes para atacar solapadamente con guerra económica, guarimbas, magnicidios e intentos de golpe de Estado. La mediática apoyará todas estas inicuas conductas de desgaste, acaparadoras, traficantes y mercaderes. Las limitaciones propias de una economía de guerra independentista no desalentó ni amilanó al liderazgo, más bien los fortaleció para alcanzar las demás victorias. El socialismo bolivariano mantiene la misma indignación contra todo intento de sometimiento al pueblo patriota. Los trabajadores y ciudadanos saben muy bien de la explotación y trampa capitalista para conseguir sus fines. El socialismo sigue en la lucha contra las desigualdades e injusticias aun presentes en la educación, salud, alimentación y vivienda. Nunca el capitalismo se apiadará del pueblo; todo servicio y bien será visto y tratado como una mercancía. La ética capitalista se basa en cuanto tienes cuanto vales. El petróleo venezolano está en sus más preciadas mercancías y harán hasta lo imposible por apoderarse por cualquier vía de estos recursos del pueblo bicentenario. Presente en esta encrucijada de los tiempos admiramos, amamos y seguimos el sacrificio y legado del más grande patriota y socialista del siglo XXI: Comandante Hugo Rafael Chávez Frías. Unida, lucha, batalla y victoria. Venceremos.