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3.Oct.2014 / 05:09 pm / Haga un comentario

rober serra

“La guerra es la continuación de la política por otros medios” es un axioma principista de la ciencia militar del sabio alemán Carl von Clausewitz, publicada en 1832 en su obra póstuma Von Kriege. El crimen político forma parte de la táctica y está asociada terriblemente a la naturaleza de la guerra. La violencia política y su brutalidad expresada en el asesinato selectivo ha sido una práctica utilizada desde la antigüedad. Es necesario aclarar, que este concepto del asesinato selectivo es una acción típicamente realizada con fines estrictamente terroristas; y a la vez definitivamente maquiavélica para liquidar a determinados personajes objetivos de la contienda. El asesinato del Mariscal Antonio José de Sucre en la montaña de Berruecos es un caso típicamente cruel y vil de este género homicida, para eliminar contrincantes políticos de gran proyección y liderazgo. Los autores intelectuales y criminales por encargo del prócer bolivariano, buscaban no sólo la muerte del insigne patriota; también proferir una sensible derrota en lo moral a los cuadros reemplazantes de la causa americana del Libertador. Indudablemente que este tipo de acción criminal canallesca busca atemorizar y cuestionar la seguridad e inteligencia de la tropa contraria. Normalmente se utilizan operaciones especiales, francotiradores, golpes de mano y en la actualidad drones, bombas selectivas y misiles inteligentes. En la doctrina militar de este siglo XXI, Estados Unidos de América, El ejército sionista de Israel y el paramilitarismo colombiano operan como practica real el asesinato de sus adversarios a lo largo y ancho del mundo. En el caso del Diputado Robert Serra y su Compañera María Herrera, tenemos la perfecta sospecha que sus asesinos responden a esta táctica operacional terrorista del paramilitarismo y el fascismo. El asesinato selectivo estudia sus blancos con gran agudeza y precisión, tanto en los asuntos personales y materiales, sus vulnerabilidades logísticas, así como sus rutinas de empleo y tránsito, su círculo de amistades y específicamente los anillos de seguridad. El asesinato selectico es una acción absolutamente planificada antes de ser ejecutada. Hay suficientes evidencias que políticos trasgresores fascista juntos al terrorismo y el paramilitarismo colombiano están involucrados en este terrible crimen del joven excelso diputado chavista. Estos asesinos saben muy bien la simbología que expresa la juventud chavista y revolucionaria para la patria de Bolívar y Chávez. Somos un pueblo heroico que nos cresemos en las dificultades. La juventud venezolana tiene temple de acero. Venceremos.

 

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