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Para quienes militamos y abrazamos el legado del Comandante Invicto Hugo Chávez, se nos presenta en este año 2015, una formidable y extraordinaria oportunidad al realizar las elecciones de los diputados del parlamento nacional. La dirigencia fundamental del PSUV convoca a sus candidatos a sembrar el socialismo y participar abiertamente en debates, discusiones y definiciones que alimenten la ideología, espiritualidad y praxis de la revolución bolivariana. En estas últimas décadas el pueblo victorioso del partido de Chávez, ha asumido una actitud crítica, reflexiva y proactiva que definen sus principios y valores rectores de la convivencia y contienda pública durante los procesos electorales. Estamos seguros que esta ocasión, cada compatriota desde su trinchera y coraje abonarán los nutrientes ideológicos del socialismo como fuerza transformadora y liberadora para la sociedad venezolana del siglo XXI. La Constitución de la República Bolivariana y el Plan de la Patria como parte del arsenal documental, serán referentes profundamente chavistas para garantizar la solidez de los argumentos en los debates y confrontaciones; más allá de las propuestas inherentes a sus contenidos, existe un conjunto de representaciones mentales, cognitivas, sensoriales y espirituales que conforman los sistemas de ideas, creencias y valores que legitiman la gobernabilidad de la revolución bolivariana, no sólo para el ámbito electoral, igualmente en la materialidad y la espiritualidad de los venezolanos en todo su contexto. Es pertinente recordar que el capitalismo como sistema hegemónico construyó su propia espiritualidad haciéndonos creer que todo se logra con dinero, negocios e individualismo. Cuantas perversiones sociales y económicas son producto de esa espiritualidad capitalista que desgracia a la humanidad y contamina al ambiente. Cuánto tienes cuanto vales son algunas de sus proposiciones. La espiritualidad es substancialmente una necesidad humana de recuperar o fortalecer la esencia de lo que somos, más allá de nuestras creencias religiosas, estatus socioeconómico o cualquier condicionamiento cultural impuesto sobre nuestras mentes y conductas, que muchas veces limitan la liberación y realización personal, familiar y comunal. Los postulados del socialismo bolivariano tiene sus raíces en el pensamiento genuino de Jesucristo Redentor de los pueblos, las ideas y doctrinas de Simón Bolívar y su legión de hombres y mujeres insignes forjadores de la patria venezolana; y muy especial seguirá siendo referente permanente el legado amoroso y militante de Hugo Chávez, padre del socialismo del siglo XXI. La Revolución Bolivariana es una revolución de amor, y para esta nueva contienda electoral seguiremos sembrando el socialismo como parte esencial de la sabiduría y los poderes creadores del pueblo heroico de Venezuela.