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Los aporte del momento estructuralista de la Teoría del Estado, especialmente de Nicos Poulanzas(1979) y del filósofo ítalo francés postmarxista Toni Negri sobre la categoría «Imperio», nos permite visualizar como El estado liberal burgués se ha convertido en una institución indudablemente al servicio del capital internacional. Las grandes corporaciones dueñas de los circuitos de producción, mercadeo y comunicación de masas han roto de manera casi irreversiblemente las barreras irresistibles de la globalización. El caso específico de la trasnacional petrolera Exxon Mobil, la cual ha materializado ante nuestros ojos como el capitalismo mundial maneja los circuitos globales de exploración y producción del petróleo, igualmente el intercambio comercial de los hidrocarburos ha influenciado fuertemente la política internacional. A la par dicha corporación maneja una estructura financiera y de mando que impone la lógica del poder en algunos Estados, actores y países; transformándose de facto con otras trasnacionales en un nuevo orden de la política internacional . En otras palabras la Exxon Mobil se ha convertido en un factor hegemón imperial que regula efectivamente una nueva tipología de poder soberano que intenta gobernar y someter al mundo. A lo largo de la historia la ExxonMobil ha realizado una serie de actuaciones perversas que atentan contra la soberanía de los pueblos y naciones; influyen como el caso Exxon Valdez, contaminando y contribuyendo con el deterioro ambiental y climático del planeta. Lo peor y descaradamente, ha sido el financiamiento crematístico de mercenarios, grupos terroristas y personajes políticos para desestabilizar y desequilibrar la paz en muchas regiones del mundo. El soborno institucional y lobby con organizaciones no gubernamentales( ONG) le ha permitido superar cualquier investigación que la colocan fuera de la ley; sin embargo en realidad, las mismas ha quedado impune. Una acusación real que se le hace a esta trasnacional fue ligarse con el régimen dictatorial de Muhammad Suharto en Indonesia con el fin de neutralizar cualquier movimiento social o político que se plantará en contra de su accionar capitalista y perverso. En una entrevista realizada a Steve Coll ganador del Premio Pulitzer(1990) por su exhaustivo libro, “Private Empire: ExxonMobil and American Power” (El imperio privado Exxon Mobil y el poder estadounidense), el escritor dio a conocer la relación entre la empresa estadounidense con las fuerzas políticas y militares de algunos países durante este período. En el caso de Guyana, sabemos que a través de su control e influencia sobre los líderes locales de opinión y gobierno transmiten una variedad de mensajes políticos abiertos y encubiertos que intentan debilitar, corroer y provocar el accionar del Estado venezolano. Inclusive algunos de manera irrespetuosa denigran de los derechos históricos y soberanos de la tenencia legítima del territorio Esequibo ; y muy particular sobre las acciones que en las instancias institucionales de derecho internacional está haciendo Venezuela contra la exploración de la Exxon Mobil en la plataforma marítima e insular de este territorio ancestral venezolano. Éste es el verdadero punto de partida de nuestro posición soberana ante esta agencia petrolera del imperio: es la noción del Estado o más bien, una nueva inscripción de la autoridad moral del Estado bolivariano y socialista venezolano contra los poderes fácticos del Estado liberal Burgués tradicional, que intentan artificialmente diseñar normas e instrumentos legales de coerción, que buscan garantizan sus contratos oprobiosos e imponer los conflictos guerreristas innecesarios. En esta nueva oportunidad esta terrible trasnacional se ha topado con la dignidad del pueblo heroico venezolano, de fibra antiimperialista y patriota. Nosotros no comemos sus cuentos y perversidades. Sabremos cómo actuar para defender integralmente nuestra patria, nuestras aguas, océano y territorios. Nuevamente invocamos a nuestros padres libertadores y al glorioso pueblo bolivariano para responder asertivamente cualquiera de sus provocaciones. Somos amantes de La Paz, no obstante no se equivoquen. La Exxon Mobil es un verdadero hegemón detestable y se los haremos saber. Venceremos..