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En la Venezuela bolivariana de la democracia participativa y protagónica, uno de los derechos de la igualdad más socialistas es el derecho político del sufragio. Es un asunto del máximo interés público, de ejercicio colectivo y acción personal secreta. Absolutamente es un rasgo sustantivo que indica libertad. Todos asistimos a ejercer este derecho sin distingo de clase, genero, color de la piel y ojos, rango, ocupación y empleo. Un voto de un compatriota pobre tiene el mismo efecto poderoso que el de la persona rica y acaudalada que tiene todos los medios para ejercerlo de manera cómoda y adecuada. Nuestros hermanos indígenas aun en las lejanas selvas y ríos, tienen este derecho tan igual como quien vive en las más suntuosas urbanizaciones de cualquier lugar del país. El pueblo que dignamente habita en los cerros y barriadas con sus múltiples situaciones y limitaciones tiene en su voto la misma fuerza transformadora que el burgués capitalista que se la cree sabérselo todo. El CNE es la institución sagrada que hará valer este derecho intransferible de todo el pueblo, en conjunto con los demás poderes públicos del Estado Venezolano. Es un acto principista de soberanía popular. Todos sabemos lo que está en decisión en esta histórica oportunidad; por esos y tantas otras razones es tan significativo darle todo el apoyo necesario a aquellos compatriotas que pudieran estar rezagados a la hora de ejercer su derecho. Es cierto que millones tomaron sus previsiones para el evento y están preparados para la elección perfecta. Se tiene la hora de la diana victoriosa para levantarse en la madrugada, y luego dirigirse a sus sitios de sufragio. Es una responsabilidad personal y compartida contar con la logística mínima necesaria y prever todos aquellos asuntos concernientes al lugar y sitio de votación. Las cientos de miles de patrullas patriotas tiene aceitada sus intenciones cooperadoras y así cumplir con lo hierático del momento. No obstante haremos todos los esfuerzos necesarios para que aquellos compatriotas que estén ese día rezagado, por cualquier circunstancia, ejerzan su derecho perfecto de votación. No es ningún secreto sobre las dificultades que muchas veces se presentan a los viajeros a nuestra región insular por las limitaciones de ruta y transporte. En el caso de aquellos que se hallen en cualquier lugar de Venezuela y requieran votar en Margarita y Coche o en cualquier ciudad del país, es prescindible proporcionar los medios para hacerlo. Es un deber patriota y revolucionario proporcionar el canal necesario para ello, y que cada voto patriota llegue a su lugar y hora precisa para garantizar la victoria perfecta. Viviremos y Venceremos.